Familia Guzmán pide reabrir el caso tras dichos de "Ramiro" sobre otros implicados

x la tercera

El ex frentista dijo que la decisión de atentar contra el parlamentario fue tomada en forma colectiva.
Una reapertura "inmediata" del caso por el asesinato del senador UDI Jaime Guzmán pidió ayer la familia del parlamentario, tras las declaraciones de Mauricio Hernández Norambuena, el "Comandante Ramiro", sobre la planificación del crimen. El ex frentista aseguró que la decisión de atentar contra Guzmán fue tomada por varios integrantes de la Dirección Nacional del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR).

"Ramiro" está condenado a dos cadenas perpetuas en Chile, por el asesinato ocurrido el 1 de abril a la salida del Campus Oriente de la U. Católica y por el secuestro de Cristián Edwards.

En una entrevista dada a Chilevisión en el penal de Catanduvas, en Brasil, Hernández Norambuena dijo que la decisión fue acordada por la directiva rodriguista y que se planeaba asesinar a otros civiles. Mencionó al ex ministro del Interior Sergio Fernández y al abogado Ambrosio Rodríguez.

El abogado de la familia Guzmán, Luis Hermosilla, llegó ayer a tribunales para entrevistarse con el juez del caso, Mario Carroza. Dijo que solicitará diligencias relacionadas con las personas nombradas por "Ramiro".

Entre ellas figura Enrique Villanueva, el "Comandante Eduardo". El ex rodriguista perteneció a la dirección del Frente y fue sindicado por Hernández Norambuena como informante del Consejo de Seguridad Pública, conocido como "La Oficina". Al respecto, el abogado Hermosilla dijo que "Hernández Norambuena da antecedentes importantísimos que lo ubican como una persona con una doble condición. Por un lado, uno de los comandantes del Frente y, por otro, un importante informante de la oficina de seguridad del gobierno".

Hermosilla agregó que quienes fomaban parte de la dirección del grupo armado eran Galvarino Apablaza, Juan Gutiérrez Fischmann, "El Chele", y Villanueva.

El abogado de "Ramiro", Alberto Espinoza, indicó que lo tiene "sin cuidado" una posible reapertura del caso, pues el ex frentista ya está condenado.

Ayer, el director ejecutivo de la Fundación Jaime Guzmán, Jorge Jaraquemada, dijo a La Tercera que los dichos de Hernández Norambuena son "gravísimos". "El insinúa que antes del atentado a Jaime Guzmán, el gobierno habría tenido información que lo alertaba sobre esa posibilidad (...) Es impensable que una autoridad haya tenido una actitud de ese tipo", manifestó.

Varios personeros de la UDI aseguraron ayer que no hubo voluntad política para aclarar el caso. El presidente de esa colectividad, Juan Antonio Coloma, dijo que "es fundamental que quienes ejercían el poder en la década del 90 expliquen a la ciudadanía qué es lo que realmente hicieron para esclarecer el caso".

El diputado DC Jorge Burgos, quien integró "La Oficina", descartó que el gobierno de la época supiera del plan o se haya encubierto a los asesinos. "Es absolutamente falso, sería ponernos en una situación de encubridores de un crimen y eso sería investigado. Las declaraciones de un homicida y un secuestrador nacional e internacional tienen el valor de quién vienen", dijo Burgos a Cooperativa.

"Ramiro" está recluido en Brasil desde 2002 por el secuestro del empresario Washington Olivetto. Para intentar acelerar su extradición, hoy se reunirá el senador UDI Andrés Chadwick con el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.
El ex frentista que vivió en Cuba y Venezuela

"Ramiro" sindicó a Enrique Villanueva Molina como la persona que informaba al gobierno de los movimientos del FPMR. Según dijo, todo era para desarticular el grupo.

El "Comandante Eduardo", como era conocido, ejerció la vocería del FPMR y ocupaba la cuarta jerarquía en la línea de mando. Según Hernández, Villanueva era informante de La Oficina desde 1990, es decir, un año antes del crimen de Guzmán.

En 1997, el "Comandante Eduardo" se fue con destino a Cuba. Sin embargo, tuvo que salir rumbo a Venezuela. El juez que investigaba el caso en ese entonces, Hugo Dolmestch, ordenó su detención y en 2001 declaró por exhorto. Aseguró no haber tenido información sobre los planes para asesinar a Guzmán. Además, negó haber sido informante de la "La Oficina".

Actualmente, Enrique Villanueva reside en Concón, V Región. En su casa, uno de sus familiares explicó que en los próximos días presentarán una querella por injurias, calumnias, daños y perjuicios contra Hernández Norambuena, a raíz de las acusaciones del ex frentista.